Alternativas al vehículo privado en la desescalada

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Alternativas al vehículo privado en la desescalada

Hemos oído mil recomendaciones relativas al coronavirus en los últimos meses. Entre ellas, las distancias sanitarias, quedarse en casa, no tocarse, lavarse las manos con diversos productos etc.

También hemos oído que los productos comprados por el Estado para proteger a los luchadores para salvarnos, no tienen la calidad, ni cantidad deseable. No proteger a los que nos ayudan es un grave desprecio a colectivos necesarios y abnegados.

Qué país… En otoño una parte importante en España, y en especial en Cataluña, hablaba de la emergencia climática. Unas muy buenas intenciones, que apenas hemos oído en apariciones públicas durante este primer semestre del año. Es salud – pero menos – aparentemente.

Una de las recomendaciones principales, hablando de la desescalada debía ser: No cojáis de nuevo el coche – el coche mata, la velocidad mata, la contaminación mata. No podemos trasladarnos de una situación donde la epidemia del virus mata y deja huella, a otra situación donde la nueva movilidad mata y de nuevo sobrecarga las urgencias con heridos.

¿Dónde está el sentido común de políticos, especialistas y expertos? Parece que los expertos en salud solamente saben algo de virus y no de heridos graves (por otra parte más habituales).

En P(A)T – que aboga por menos víctimas y menos heridos – nos preocupa enormemente esta ligereza demostrada por las administraciones. “Ruedas en marcha: hay que recuperar la economía!”.

¿A caso no es posible explicar que no queremos volver a llenar las calles y carreteras de máquinas agresivas? ¿A caso no es posible lograr un cambio en la movilidad (al menos) en las ciudades? Nuestra propuesta es que se declare prioridad para el transporte público (con carriles bus, mejoras en los semáforos, mejoras en las paradas y algunas otras actuaciones) que puedan aumentar la velocidad comercial de los autobuses y garantizar unas frecuencias más adecuadas a la grave situación que vivimos. Un decreto que obligue a los ayuntamientos a cambiar los detalles de los semáforos a favor del bus sería una iniciativa loada por los ciudadanos que se mueven con movilidad sostenible.

Queremos salvar vidas en la movilidad ahora y en el futuro y no olvidar, como es normal, a los ciudadanos que no se desplazan en vehículo privado.

Ole Thorson, miembro de la junta de P(A)T